Turismo gastronómico, cultural, de aventura, gastronómico, enológico… Son decenas las excusas que los viajeros del siglo XXI pueden argumentar para plantearse una escapada a un lugar recóndito del mundo.
Pero últimamente se ha puesto de moda el turismo deportivo. Miles de locos del deporte de cualquier parte del mundo se plantan en un avión para llegar a tierras remotas donde practicar golf, bucear, descubrir los secretos del surf, realizar treking o senderismo, apuntarse a un prestigioso maratón, realizar carreras de orientación, etc.
Hoy queremos revelarles los ganchos que tiene Turquía para los amantes del deporte.
Para los que buscan diversión cargada de adrenalina, Kaş, una bonita ciudad pesquera, tiene fama por su oferta internacional de ciclismo de montaña y, para los más valientes, de parapente.
Para quienes tienen el vicio de sumergirse en las profundidades, para los fanáticos del mar, las aguas color zafiro de Turquía son un paraíso para los buceadores. Hay muchos puntos privilegiados, al igual que existen famosos spot para los amantes del surf.
Durante los meses de invierno hay prestigiosas estaciones de esquí en Turquía. Uludaǧ, que se encuentra a menos de una hora y media de distancia en coche de la capital, Estambul, es famosa entre los turistas. Esta estación tiene desde pistas para principiantes hasta slaloms gigantes, además de fantásticas instalaciones y una animada vida nocturna.
Además, durante los meses de verano, este parque nacional de Uludaǧ permite acampar y realizar caminatas de una extraordinaria belleza, con paisajes indescriptibles como fondo.
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